Mantener un restaurante o cualquier negocio de hostelería es realmente costoso. Desde los distintos seguros, sueldos de los empleados, maquinaria, menaje de hostelería… y, por supuesto, las facturas. Éstas representan un importante porcentaje del total de costes. Muchos empresarios de la restauración y del sector de la hostelería se han fijado en grandes cadenas de hoteles a la hora de reducir esos costes. ¿Cómo? Con una apuesta decidida por la energía solar.