Es aquella que obtenemos al capturar la luz y el calor del Sol para transformarlos en energía útil para nosotros.
La energía verde es aquella que se obtiene a partir de fuentes renovables y limpias, es decir, que no emiten gases contaminantes ni generan residuos tóxicos. La transformación de esta radiación solar en energía eléctrica se realiza mediante las llamadas células fotovoltaicas, un material semiconductor fabricado con láminas de silicio.
Según diferentes estudios, el Sol nos proporciona cada año más de 4 mil veces la energía que consumimos en toda la Tierra, por tanto podemos asegurar con rotundidad que cuando hablamos de energía solar estamos hablado de un recurso inagotable.
Es una forma de energía renovable, limpia y sostenible que se puede utilizar para generar electricidad, calentar agua y proporcionar calor para aplicaciones industriales y residenciales.